martes, 12 de agosto de 2008

orientación sexual

ORIENTACIÓN SEXUAL

La orientación sexual es la capacidad natural que determina las preferencias sexuales y afectivas de un individuo.

El ser humano tiene la posibilidad de moverse en tres diferentes aunque complementarias orientaciones sexuales:

  • Orientación homosexual, o gusto por relacionarse afectiva y/o eróticamente con personas del mismo sexo.
  • Orientación heterosexual, en donde la atracción se dirige hacia personas del sexo complementario, mal llamado sexo opuesto.
  • Orientación bisexual, en donde indistintamente o por momentos específicos las personas pueden relacionarse afectiva y/o eróticamente tanto con miembros de su propio sexo como con los del sexo complementario, y esto puede ocurrir alternadamente o al mismo tiempo.

Según Alfred Kinsey, el 50% de los hombres adultos ha tenido cuando menos una relación homosexual.

¿Qué aspecto de nuestra vida es el más decisivo para decidir nuestra orientación sexual?

El Dr. Fritz Klein nos propone siete aspectos:

  1. La atracción sexual.
  2. El comportamiento sexual.
  3. Las fantasías sexuales.
  4. La afinidad emocional.
  5. La afinidad social.
  6. El estilo de vida (homosexual o heterosexual).
  7. La autoidentificación o la autoadescripción.

Además, para sofisticar más el análisis de la orientación sexual, Klein nos propone establecer los siete valores en tres momentos:

  1. Cómo fue mi vida anteriormente.
  2. Cómo es actualmente.
  3. Cómo desearía que fuera en el futuro.

HOMOSEXUALIDAD

Homosexual es toda persona que se relaciona, sexual, afectiva y emocionalmente con personas de su mismo sexo. La raíz etimológica viene del griego homo (idéntico, el mismo, igual) y no del latín homo (hombre) como pareciera.

La homosexualidad se inscribe en el universo de las orientaciones humanas, y tiene tanto o tan poco sentido preguntarse la causa de la homosexualidad, como preguntarse la causa de la heterosexualidad.

En 1993, Hamer y colaboradores, investigadores del National Cancer Institute, ofrecieron lo que parece ser crucial, en caso de ser confirmado, acerca del origen genético de la orientación sexual en su artículo A linkage between DNA markers on the X chromosome and male sexual orientation (relación entre marcadores de ADN en el cromosoma X y la orientación sexual en el hombre).

Se realizó el análisis del ADN en el cromosoma X en un grupo de 40 familias en las que había dos hermanos de orientación homosexual, y se encontró la relación de línea materna en el 64 por ciento de las familias investigadas. La relación con marcadores se reportó en la región subtelométrica Xq28 del brazo largo del cromosoma X.

Según Hamer, este hallazgo muestra una cifra LOD de 4.0 que se traduce en que hay una certeza del 99.5 por ciento de que existe un gen o genes en esa área del cromosoma X que predisponen a la homosexualidad.

Por su parte, en 1956 la Doctora en sociología Evelyn Hooker publica su artículo “La adaptación del varón homosexual asumido” (The adjustment of the male overt homosexual), aquí narra cómo realizó una prueba a 30 hombres homosexuales y a 30 hombres heterosexuales, todos de edades, escolaridad y niveles de inteligencia similares, y envió sus resultados a tres psicólogos destacados considerados expertos en la interpretación de estas pruebas. Los expertos no encontraron ninguna diferencia significativa entre los dos grupos ni pudieron diferenciar cuáles pruebas correspondían a los homosexuales y cuáles a los heterosexuales, con lo cual se concluyó que no existía ninguna diferencia en la salud mental entre los integrantes de ambos grupos.

Abordar la compleja cuestión de lo que lleva a un individuo a un comportamiento homosexual no es tarea fácil. Bell, Wienberg y Hammersmith en su estudio titulado Sexual preference: lts development in men and women de 1981, emplean una metodología nueva y sutil en su aproximación a este tema.

En función de los resultados de su análisis, los investigadores llegaron a las siguientes conclusiones:

  • No existen indicios claros de que la homosexualidad masculina tenga su origen en el hecho de que el hombre haya sido educado por una madre dominante y un padre de poco carácter o de carácter inadecuado por otros conceptos.

  • No existen pruebas que sustenten la teoría de que la homosexualidad femenina se deba a que una niña escoja a su padre como modelo de rol a desempeñar.

  • Carece de base el mito de que muchas veces la homosexualidad se debe al hecho de haber sido seducido por una persona de mayor edad y del mismo sexo.

  • Al llegar la adolescencia la orientación sexual del individuo ya se halla firmemente arraigada, y los sentimientos hacia el sexo rara vez experimentan cambios de orientación importantes en la edad adulta.

  • Los homosexuales tienen tantas experiencias heterosexuales en la niñez y en la adolescencia como sus homólogos heterosexuales, pero estas les parecen poco placenteras o nada gratificantes.
  • La inadaptación de género en la niñez, por ejemplo el niño que no quiere jugar fútbol y en cambio opta por actividades más “de niña” como jugar a la comidita o a las muñecas, es un elemento importante, aunque no seguro, de predicción sobre la futura evolución de la homosexualidad.

BISEXUALIDAD

Durante años se ha creído que esta orientación sexual es una fase previa a la homosexualidad, sin embargo, la realidad es que no hay rasgos arquetípicos que definan a una persona de este tipo. Según los últimos estudios realizados por la Dra. Jean Schaar, aproximadamente el 65 por ciento de las personas con esta orientación están casadas; la bisexualidad es hasta dos veces más común que la homosexualidad, se presenta en hombres y en mujeres y es en la intimidad donde manifiestan su gusto por relacionarse eróticamente con personas tanto de su propio sexo, como del sexo complementario.

Más allá del sexo: La teoría revolucionaria es la de los investigadores australianos M. Ross y J. Paul, quienes en 1992 sugirieron que tanto la homosexualidad como la heterosexualidad estaban muy ligadas al género, justo lo opuesto a la bisexualidad, y el resultado de su trabajo de campo les dio la razón: las personas que se declararon bisexuales aseguraron que para ellos la atracción sexual era independiente del sexo de la persona deseada.

La orientación sexual de una persona no se cambia ni con terapias, ni con apapachos, ni con cariño, ni con castigos ni con promesas. La orientación sexual de las personas, o sea, la atracción que sienten por uno u otro sexo, no es un capricho voluntario ni es el producto de una decepción, no es algo que se elige sino que viene con nosotros y nos acompaña de por vida.

4 comentarios:

Luthien dijo...

Miss que bueno que escribes!

Por este post..creo que decidí que soy bisexual jajajaja ntc

Oye, cómo va ese embarazo? espero que todo bien, besos pa' ti y pa'l bebito =)

Lata dijo...

Ay que inspirada anda usted :P

Anónimo dijo...

Amen!!!!!

No podria estar mas de acuerdo con tu post!!

Hacia mil años q no pasaba por aca.. saludos!!!

Anónimo dijo...

hola que milagro!!! espero que estes bien con tu bebe proximo yq eu todo estebien!!! y luego nos presumes tu pancita sale!!!